¿Recuperará el parque del Retiro su antiguo templete árabe? Esta propuesta del Foro Local del Distrito de Retiro ha contado con el visto bueno de Patrimonio y de la Junta, aunque nada garantiza que vaya a llevarse a cabo.
La iniciativa fue formalmente aprobada en el Pleno del Distrito del 9 de febrero, aunque suscitó en realidad más abstenciones (incluida la del socio mayoritario en el gobierno municipal) y algún rechazo que adhesiones. No obstante, cuenta con un informe favorable de la Dirección General de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Madrid, que señala que «merece un profundo estudio histórico y documental» y ser integrada en «un futuro Plan Director del Buen Retiro que contextualice estas piezas que en su día asombrarían a los ciudadanos y visitantes de su época».
El templete árabe o pabellón árabe del Retiro fue una preciosa obra de Ricardo Velázquez levantada en 1883 como parte de las instalaciones de la Exposición Nacional de Minería, Artes Metalúrgicas, Cerámica, Cristalería y Aguas Minerales, para la que se construyó también el llamado Palacio de Velázquez. Se llamaba oficialmente Pabellón Real, pero fue conocido como «árabe» por su aspecto. Su peculiar estilo debe enmarcarse en la moda neoárabe o neoislámica que se extendió en la arquitectura española a finales del siglo XIX, y que derivó finalmente en la adopción del neomudéjar como estilo arquitectónico dominante en muchas obras públicas. Ya en 1857 se había levantado en Madrid un pabellón de estilo «arábigo» para la Exposición de Agricultura, y el éxito alcanzado lo convirtió en modelo apreciado tanto para la construcción de quioscos permanentes, como el del Retiro, como en los pabellones que representaron a España en diferentes Exposiciones Universales.
El templete árabe se alzó sobre una cueva artificial, aún existente, junto al estanque del Palacio de Cristal, y fue sin duda una de las atracciones más conocidas del parque, de la que se hicieron numerosas fotos y postales. No tenía más función que la estética. Con el tiempo y la falta de mantenimiento fue deteriorándose, hasta que finalmente en los años cincuenta del siglo pasado se derribó. Solo quedó el promontorio de rocalla sobre el que se asentaba.
A través de la Asociación Vecinal de Retiro Norte, el CEMI se ha puesto en contacto con Antonio Martínez, coordinador de la Mesa de Cultura de Retiro, para saber más del proyecto:
CEMI: ¿De dónde y por qué surge la iniciativa? Hemos visto que ya se planteó en Decide Madrid (el portal de participación ciudadana) en enero de 2018.
Antonio Moreno: La iniciativa surge de las charlas y actividades para vecinos de historia y cultura del distrito de Retiro que solían hacerse antes de la pandemia. En ellas, cuando se hablaba del Retiro y su historia siempre se comentaba la idea de recuperar algunos de los elementos perdidos del parque. En este caso la cuestión está unida también a la pérdida que ha tenido nuestra ciudad de la arquitectura neoárabe, que prácticamente ha desaparecido. De hecho, en el vecindario ha habido una campaña a favor de la Sala Árabe del Salón de Reinos, que se quiere que se reubique en otro edificio del distrito para que sea visitable por todos.
CEMI: ¿Existen restos del templete árabe reutilizados o almacenados en algún sitio? ¿Hay planos?
Antonio Moreno: Que yo sepa no hay restos del templete. Aunque la zona donde estaba sigue siendo aprovechable ya que es la parte superior de la cueva del estanque del Palacio de Cristal. Planos debería haber en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid o en el Archivo de Villa. Es obra de Ricardo Velázquez Bosco y debe haber información de época sobre él.
CEMI: La iniciativa tiene un informe favorable firmado por Luis Lafuente, director general de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento. ¿Ha tenido buena acogida en la Junta?
Antonio Moreno: El informe de Patrimonio es una buena noticia, ya que normalmente este tipo de propuestas donde más tropiezan es con los funcionarios o técnicos. En la Junta la acogida fue algo fría, ya que solo votaron a favor PSOE y Ciudadanos. Más Madrid de abstuvo por pensar que había ahora otros gastos más prioritarios. PP se abstuvo porque rechaza los foros locales, igual que Vox, que votó en contra.